Los desafíos de la Nueva Ruta de la seda para América Latina:
entre la autonomía y la dependencia
DOI:
https://doi.org/10.35305/prcs.v0i10.384Palavras-chave:
Iniciativa de la franja y la ruta, China, América LatinaResumo
La complejidad que implica el tablero de las relaciones internacionales ha experimentado importantes cambios en este último siglo. La iniciativa impulsada por China desde el 2013 conocida como “Iniciativa de la Franja y la Ruta” (IFR), o como el “proyecto del siglo” tiene el potencial de cambiar la geografía económica y estratégica del mundo, re orientándola hacia el pacífico, con centro en Oriente.
En el caso de América Latina se refleja en una fuerte cantidad de inversiones en infraestructura, orientando el comercio hacia una reprimarización de las economías regionales. Después de siete años del lanzamiento oficial de este proyecto se abre el interrogante sobre si las nuevas estructuras y entidades financieras creadas por China se orientarán a profundizar el denominado consenso de Beijing, y sobre cuáles son los riesgos y desafíos de la nueva Ruta de la Seda para América Latina.
El presente trabajo tiene como finalidad analizar geopolíticamente, desde una perspectiva latinoamericana, cuales son las implicancias de la Nueva Ruta de la Seda para la región, planteando el desafío que implica insertarse dentro del plan chino, las oportunidades que genera en términos de desarrollo y cuales son los márgenes de autonomía. Para esto a los fines metodológicos, el trabajo está centrado en tres aspectos: a) los lineamientos generales y estratégicos de la Nueva Ruta de la Seda; b) el significado y alcance para la región; y c) y el desafío entre las oportunidades y la autonomía que se plantea la región ante el BRI.